Según estudio, se utilizó la Imagen por Resonancia Magnética Funcional (fMRI) para analizar cómo el cerebro reacciona ante variaciones de precio en las decisiones de compra
MÉXICO.- La neuroeconomía y la investigación en neuroimagen han revelado que las emociones desempeñan un papel crucial en las decisiones de compra de los consumidores.
El autor del estudio, experto en economía conductual, enfatiza la necesidad de reconocer el papel de las emociones en los procesos de decisión y trabajar en su control para lograr una conducta financiera más sólida. | pexels
Según un estudio realizado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts, se utilizó la Imagen por Resonancia Magnética Funcional (fMRI) para analizar cómo el cerebro reacciona ante variaciones de precio en las decisiones de compra.
El estudio encontró que cuando una decisión de compra se percibe como favorable, se activa una región del cerebro asociada con los centros de placer.
En contraste, cuando una decisión de compra no produce satisfacción, se activan áreas relacionadas con experiencias emocionales y el procesamiento de la sensación del dolor.
Estos hallazgos demuestran que las emociones juegan un papel fundamental en el proceso de toma de decisiones de compra.
Aunque los participantes del estudio expresaron opiniones racionales sobre sus decisiones de compra, las respuestas cerebrales contradecían estas afirmaciones verbales.
Reconocer el componente emocional en las decisiones de consumo es esencial para tener un mayor control sobre ellas y evitar que nuestras emociones dominen nuestras decisiones financieras.
Cada individuo tiene disparadores emocionales específicos que pueden llevar a decisiones financieras inadecuadas. Mejorar la conducta financiera implica analizar estos factores emocionales y aprender a canalizar nuestras emociones de manera beneficiosa.
Este estudio resalta la importancia de comprender cómo las emociones influyen en nuestras decisiones de compra. Al tener en cuenta este aspecto, podemos tomar decisiones más informadas y conscientes, evitando caer en comportamientos impulsivos que pueden afectar nuestra situación financiera.
El autor del estudio, experto en economía conductual, enfatiza la necesidad de reconocer el papel de las emociones en los procesos de decisión y trabajar en su control para lograr una conducta financiera más sólida.
Fuente: Instituto Tecnológico de Massachusetts