De acuerdo con el SAT, comprar o vender facturas que amparen operaciones falsas puede llevarte a estar hasta 15 años en prisión, debido a que esta práctica es un delito
MÉXICO.- Cumplir con las obligaciones fiscales como contribuyente con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), es muy importante para evitar sanciones, pero a veces este compromiso lleva a algunas personas a comprar o vender facturas.
Comprar o vender facturas puede llevarte a ser acusado de delitos como lavado de dinero, delincuencia organizada o defraudación fiscal | Pexels
De acuerdo con el SAT, comprar o vender facturas que amparen operaciones falsas puede llevarte a estar hasta 15 años en prisión, debido a que esta práctica es un delito.
¿Qué pasa si compras o vendes facturas, según el SAT?
Al comprar o vender facturas de operaciones falsas, se incurre en varios delitos, como lo son: Lavado de dinero, delincuencia organizada o incluso defraudación fiscal.
Según el artículo 108 del Código Fiscal de la Federación, comete delito de defraudación fiscal quien con uso de engaños o aprovechamiento de errores, omita total o parcialmente el pago de alguna contribución u obtenga un beneficio indebido con perjuicio del fisco federal.
La consultora Bandala Díaz García menciona que la venta de facturas por Internet ha alcanzado popularidad, e incluso las venden públicamente, pese a que esto es un delito.
SAT identificó 43 empresas factureras en 2020
En junio de 2020, el Servicio de Administración Tributaria dio a conocer que analizó 22 millones de facturas, que le permitieron identificar a 43 empresas que venden facturas de operaciones simuladas.
La forma de operar consiste en que una empresa, que es la factutera, expide una factura por un bien o servicio inexistente y solicita una comisión por ello”, explicó la autoridad fiscal.
Hasta el 2020, el SAT afirmó que durante los 10 años anteriores surgieron las empresas que facturaban operaciones simuladas, con lo que aumentaban los gastos reales de alguna empresa para disminuir sus utilidades y así, el pago de sus impuestos, lo que se conoce como defraudación fiscal.