Los créditos personales son aquellos que se pueden solicitar en distintas entidades, en las que te prestan una cantidad limitada de dinero para poder hacer frente a urgencias financieras que las personas puedan tener para un imprevisto personal.
MÉXICO.- Los créditos personales son aquellos que se pueden solicitar en distintas entidades, tales como Creditea, en las que te prestan una cantidad limitada de dinero para poder hacer frente a urgencias financieras que las personas puedan tener, ya sea porque han tenido un imprevisto personal, algún accidente o cualquier descuadre en las finanzas personales que no se haya considerado de forma anticipada.
Solicitar un préstamo puede significar pago de comisiones, seguros, entre otros gastos que pueden variar según la entidad donde lo solicites. | pexels
Cuando llegan estas situaciones puede ser muy difícil hacerles frente cuando el presupuesto familiar o personal está muy ajustado. Es por esto que en México el uso de estas herramientas financieras suele ser muy popular.
Bien sabemos que el nivel del costo de la vida ha incrementado constantemente con el pasar de los años y el nivel promedio salarial no lo ha hecho en la misma medida.
Cuando estas dos variables se contraponen deja a la población trabajadora en una compleja situación ya que, tal vez los gastos de primera necesidad pueden ser cubiertos, pero todo lo que tiene que ver con ocio y recreación queda relegado al final de las prioridades, provocando que la vida de las personas carezca de momentos de disfrute y eleve los niveles de estrés.
Si usas préstamos personales, recuerda hacerlo con responsabilidad financiera
Debemos recordar que el objetivo de estos préstamos es ayudar a hacer frente a las tan indeseadas urgencias, que claramente significa que ya se cuenta con un presupuesto ajustado.
Es por esto que al momento de solicitar uno de estos, se debe tener absoluta claridad de que se podrá hacer frente a los pagos futuros que vendrán los próximos meses, porque fallar a estos plazos puede significar, no solo grandes dolores de cabeza, sino que también tener en las deudas acumuladas personales un monto muy superior al originalmente prestado.
Si bien en un momento puede verse como una muy buena solución, posteriormente las tasas de interés por faltas serán un problema aún mayor.
Consideraciones antes de pedir un préstamo personal
Evalúa tu capacidad de pago. Como mencionamos anteriormente, es muy importante que tengas claro que solicitar un préstamo no sólo significa un alivio financiero al momento de recibir el dinero, sino que estás contrayendo responsabilidades futuras, por lo que debes tener muy claro de qué forma harás frente a estos pagos. Debes incluir esta deuda en tu presupuesto de los próximos periodos.
Compara las distintas alternativas que existen en el mercado. Como en toda decisión financiera debes tener en cuenta las alternativas con las que cuentas. Hoy en día el mercado financiero entrega una multiplicidad de opciones que muchas veces pueden parecer abrumadoras.
Utiliza herramientas que faciliten la comparación de las opciones o en su defecto, asesórate con algún experto para poder tomar una decisión informada.
Analiza y sopesa la real urgencia de las necesidades. Recuerda no abrumarte de sobremanera. Tomar una decisión que involucre obligaciones futuras debe ser hecho con la mente clara y despejada para no cometer errores evitables. Muchas veces la desesperación nos puede hacer tomar acciones poco eficientes o menos productivas.
Tómate el tiempo de analizar realmente por qué estás solicitando el préstamo y evalúa que tan urgente es cumplir con el gasto que estás considerando.
Ten en cuenta los gastos asociados. Además, nunca olvides revisar todo lo que involucra la solicitud del préstamo. Muchas personas suelen quedarse con la información inicial y no prestan atención a los gastos asociados que puede llevar esta operación.
Solicitar un préstamo puede significar pago de comisiones, seguros, entre otros gastos que pueden variar según la entidad donde lo solicites.
Fuente: Creditea