Datos reveladores del Inegi y consejos clave de la Condusef para superar obstáculos y construir un futuro financiero sólido
MÉXICO.- Ahorrar en México, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), se presenta como un desafío considerable. Los datos más recientes revelan que el 40% de la población enfrenta dificultades para guardar dinero.
Desarrollar el hábito del ahorro, según la Condusef, implica tener un propósito definido, analizar la situación financiera para determinar cuánto se puede destinar al ahorro y eliminar gastos innecesarios. Estos pasos, asegura la comisión, son clave para construir un futuro financiero sólido y alcanzar metas a corto, mediano y largo plazo. | pexels
Esta situación se atribuye, en muchos casos, a las necesidades diarias apremiantes y, en otros, a la falta de desarrollo del hábito de ahorro.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) ha señalado que el ahorro es una asignatura pendiente para los mexicanos.
Apenas seis de cada diez personas logran ahorrar, y de ese grupo, la mitad lo hace de manera informal, exponiendo su dinero a riesgos. Un porcentaje menor opta por herramientas formales que generan rendimientos y ofrecen seguridad en sus ahorros.
La finalidad del ahorro, según la Condusef, va más allá de acumular fondos. Además de contribuir a mantener finanzas saludables, el ahorro tiene dos funciones fundamentales: la prevención para enfrentar emergencias médicas, problemas con el automóvil u otras necesidades urgentes, y la inversión para multiplicar el dinero o financiar proyectos a mediano o largo plazo, como abrir un negocio, adquirir bienes o realizar viajes.
La dependencia destaca la importancia de considerar la edad y el contexto personal al establecer metas de ahorro. Las recomendaciones varían según la etapa de vida:
20-29 años: La mitad de los ingresos si se vive con los padres y no hay responsabilidades familiares más allá de los gastos básicos. El 15% de los ingresos si se vive solo.
30-39 años: Del 30 al 40% de los ingresos si se vive solo y no se tienen hijos. El 15% si ya se tiene familia o se está pagando un crédito hipotecario.
40-49 años: Se recomienda ahorrar del 30 al 40% de los ingresos, independientemente de la situación familiar o de vivienda.
50-59 años: Cerca del 20 o 30% de los ingresos recibidos, considerando el posible desplazamiento de empleos en esta etapa de la vida.
60 años en adelante: Aunque muchas personas dejan de trabajar, la Condusef sugiere seguir ahorrando, proponiendo el 15% de los ingresos, ya sean por trabajo, pensión o apoyos familiares.*
Desarrollar el hábito del ahorro, según la Condusef, implica tener un propósito definido, analizar la situación financiera para determinar cuánto se puede destinar al ahorro y eliminar gastos innecesarios.
Estos pasos, asegura la comisión, son clave para construir un futuro financiero sólido y alcanzar metas a corto, mediano y largo plazo.